jueves, 22 de septiembre de 2016

El Gallo no pudo avanzar pero cumplió por demás en la Copa Argentina. Rosario Central fue mas en la cancha y Morón fue muchísimo mas en las tribunas

Se acabó la ilusión. Se terminó el sueño para el Gallo. Pero sin dolor. Sin drama. Sin tristeza. Con la dignidad del deber cumplido, y mas. Con la satisfacción de haber llegado adonde llegó. Con el orgullo de ser de Morón, y haber demostrado lo grande que es. 
El equipo del Gallo, esta vez, se quedó sin cheque. Pero muy digno y valorable lo suyo, a pesar de ser superado, no desentonó como para caer en alguna crítica. Lo de la gente que copó Salta  y triplicó a los rosarinos : sensacional, espectacular, conmovedor.

Porque lo que quedó de saldo, mas allá del partido, mas allá del resultado, es la conmovedora demostración de fidelidad de la gente del Gallo. Que en un número de mas de 2.000 hinchas, que viajaron de todos los modos posibles : por avión, en micros, en combis, en autos, a mas de 1.500 km de distancia, honestamente creeemos que eso está reservado solamente a los grandes, y nos referimos a los grandes de verdad, a los grandes de la A. Porque son contados con los dedos de la mano, los clubes que pueden tener este despliegue de gente, y con esa pasión inconfundible, y que ya tiene marca propia : es la gente de Morón. Además de esto, de lo importante, lo notable, y lo significativo de los hinchas, hubo un partido. Y ese partido, como sería lo lógico, marcó una diferencia notoria a favor del equipo que milita en la Primera A. Morón aguardaba que las cosas no se hubieran dado así, pero para eso, Central tendría que haber tenido una noche negra, y por supuesto que no la tuvo. Y Morón debía haber tenido la gran noche de su vida, y tampoco la tuvo, si bien, cumplió, hizo lo que pudo, y no fue superado de una forma abrumadora. Se notó el nivel distinto de categoría, y no solo futbolístico, sino también, físico, que se vio en el ritmo, en la velocidad de uno y de otro. El gallo, mantuvo la línea, y aguantó el resultadto en 0 en el primer tiempo, con esfuerzo, esos si, y algo de suerte también. Luego, llegó la apertura con un golazo por un tiro de larga distancia de Walter Montoya, y después, los rosarinos se relajaron un poco, y permitieron que Morón tuviera algunas aproximaciones, cuando iba 1 a 0 abajo, pero fue muy tenue, y no permitió que el empate fuera algo que se pudiera palpitar. Bien Morón igual, llegó lejos, mucho mas de lo que se esperaba : misión cumplida !!.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario